En la Biblia en el libro de Hechos hay una historia sobre un regalo y una promesa muy especial.
Los amigos y ayudantes de Jesús se reunieron en el segundo piso de un salón. Aunque afuera brillaba el sol, tenían cerradas las ventanas y la puerta cerrada con llave. ¿Qué les pasaba a los amigos de Jesús?
Jesús le había dado una instrucción: “esperen en Jerusalén, enviaré un regalo especial para ustedes. El Espíritu Santo vendrá sobre ustedes. Así que allí estaban esperando. Jesús no quería que sus amigos se quedaron solos, así que prometió enviar a un amigo especial. ¿Quién era ese amigo especial? El espíritu Santo. Jesús cumplió su promesa y cuando regreso al cielo, envió al Espíritu Santo, uno de los regalos más hermosos que Dios te puede dar.
Cuando recibes a Jesús como Señor y Salvador tenemos al Espíritu Santo en nosotros. El Espíritu Santo te consuela, acompaña y enseña. La Biblia dice en Juan 14:16 (TLA)“Y yo le pediré a Dios el Padre que les envíe al Espíritu Santo, para que siempre los ayude y siempre esté con ustedes”