Es posible prevenir y manejar la ansiedad en los niños
Según Psychology Today, los Centros para el control y prevención de enfermedades en los Estados Unidos, indican que el 7 % de los niños de 3 a 17 años han sido diagnosticados con un trastorno de ansiedad; la edad media de aparición es de 11 años, lo cual nos deja la interrogante: ¿Qué puede preocuparle a un niño a tal grado de sentir ansiedad?
Iniciamos cada día con niños hiper estimulados, agendas llenas, exceso de actividades extracurriculares, tareas escolares, mundo digital y las etapas del desarrollo. ¡Hay mucho por hacer y sentir! Para el mal que más relevancia ha tomado en los últimos años, los padres deben convertirse en buenos detectives, ya que los signos de la ansiedad están a la orden del día y aprender a manejarlo, o en el mejor de los casos prevenirlo, será de mucha utilidad.
Una forma de prevenir y manejar la ansiedad es observar a tus hijos. ¿Ha cambiado su conducta? Físicamente, presentan algún malestar como dolor de cabeza, alergias, palpitaciones, sudoración excesiva, adormecimiento de miembros inferiores o superiores. ¿Te ha dicho que tiene temor de hacer algo que antes realizaba con normalidad?, ¿crees que se ha aislado?, ¿está comiendo en exceso o, por el contrario, ha dejado de comer?
Acciones para prevenir y controlar la ansiedad
Primero: Abre espacios de comunicación genuina con los niños. Es necesario no emitir juicios y actuar sin hacer sonidos o con gestos sobresaltados. Solo necesitas que tus hijos sepan que, como padres amorosos, están para ellos y que juntos pedirán a Dios su guía y apoyo.
Segundo: Brinda seguridad desde el hogar. Busca formas de reafirmar su identidad; corrige conductas perfeccionistas, diálogos internos negativos y, sobre todo, presenta a Jesús como la salida a cualquier dificultad. Además, recuerda que las etapas del desarrollo, el ambiente, la cultura, la escuela, los amigos y demás factores son influyentes en la autonomía, independencia e inteligencia emocional de los niños.
Tercero: Una relación personal con Jesús ayudará a transitar por cualquier episodio de ansiedad. Considera que en 1 Pedro 4:7 dice que echemos toda nuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de nosotros y eso incluye a nuestros hijos. Si tu hijo ya lo ha sufrido o se encuentra atravesando un proceso de ansiedad, oren juntos; exponer tu humanidad hará que ellos también puedan hacerlo.
Cuarto: Acompaña la oración, lectura de la Palabra y la relación con Dios. Mantengan la buena comunicación en la familia con actividades al aire libre, reducción de la ingesta de azúcar, palabras de validación y actividades no tecnológicas que disfruten juntos, libres de cualquier presión.
Quinto: Confía en que Dios tiene el cuidado del corazón de tu hijo. Recuerda que no habrá ansiedad que marque su vida; por el contrario, Él guardará sus corazones y pensamientos en Cristo Jesús, tal y como lo señala el apóstol Pablo: No se preocupen por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias, y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7 (NVI).
Por: Cessia Collado de Revolorio
Psicóloga y Consejera familiar


