Noé es obediente y valiente (Génesis 6; Génesis 9)
Noé era un hombre justo y honesto que vivía de acuerdo con la voluntad de Dios. En esa época la gente se había olvidado de Dios y se portaba muy mal. Dios estaba muy triste y había decidido borrar de la faz de la tierra a todas las personas y animales que había creado.
Dios le dijo a Noé lo que haría y le dio una instrucción muy importante: “Construye una barca enorme, usa la mejor madera”, y le dijo las medidas que debía tener la nave. Y le dio otra instrucción: “Sube en el barco una pareja de animales de cada especie que hay en la tierra”. Noé fue obediente y se puso a trabajar.
Las personas lo miraban y se burlaban de él y le decían que estaba loco para construir un barco enorme y que no llovería tan fuerte como para que se inundara la tierra. Noé y su familia confiaron en Dios, así que siguieron trabajando. Después de varios meses el arca quedó terminada.
Llegó el tiempo en que Dios mandó la lluvia por cuarenta días y cuarenta noches. El barco enorme flotaba, la tierra estaba cubierta por completo de agua. Noé y su familia estaban a salvo.
Recuerda que Dios te ayuda a ser valiente y obediente, como lo hizo con Noé y su familia. Decide hacer siempre lo correcto a pesar de lo que digan los demás.
