Dios envió a su Espíritu Santo para soplar vida a su iglesia. Después que Dios enviara al Espíritu Santo, la iglesia no tenía vida… como este globo. Después que el Espíritu Santo soplará aliento de vida, las personas empezaron a contarle a todo el mundo las buenas noticias de salvación. Muchas personas se unieron a la iglesia. La iglesia era obediente y hacia todo lo que Dios le dijo.
Recuerda que, así como el globo necesita llenarse de aire para ser lo estaba destinado a ser, tú y yo necesitamos que el Espíritu Santo nos llene para poder ser quienes Dios quiere que seamos.