Según la Revista Christianity Today https://www.christianitytoday.com/ este año, los 10 países que encabezan la lista de persecución a los cristianos se mantienen relativamente sin cambios en comparación con el informe anterior. Después de Corea del Norte se encuentra Afganistán, seguido de Somalia, Libia, Pakistán, Eritrea, Yemen, Irán, Nigeria e India.
Cada día 12 cristianos son asesinados en todo el mundo a causa de su fe. Cada día 12 iglesias son atacadas, 12 cristianos son arrestados o encarcelados injustamente.
En nuestro país, Guatemala, tenemos libertad de expresión y religión que debemos aprovechar para anunciar la buena noticia de la salvación.
Pero ¿Cómo iniciaron a compartir del amor de Jesús hace miles de años?
Cada día después de la fiesta de Pentecostés, los apósteles predicaban y obraban en milagros. Y cada día más personas se bautizaban y convertían en seguidores de Jesús.
Un día, Pedro y Juan iban en camino al templo para orar, cuando un hombre paralítico los detuvo y les pidió algunas monedas. No tenemos dinero, le respondieron Pedro y Juan. Pero lo que tenemos, te lo daremos… en el nombre de Jesús, ¡levántate y camina! Pedro le dio la mano al hombre y lo animó a ponerse de pie. ¿Qué crees que sucedió? Si el hombre se levantó y dio unos cuantos pasos vacilando, luego comenzó a bailar de alegría… bailó todo el camino hasta el templo, detrás de Pedro y Juan.
Pedro se acercaba a las personas y les hablaba del amor de Dios y los milagros de sanidad que había hecho. Al oírlo los líderes religiosos estaban furiosos porque nuevamente el nombre de Jesús alborotaba a las personas. Hicieron que Pedro y Juan fueran a la cárcel, aunque no habían hecho nada malo.
Pedro y Juan sabían lo que debían hacer, Jesús le había enseñado a no tener miedo porque sabían que el Espíritu Santo les diría lo debían hacer y decir a los líderes religiosos.
Recuerda que, así como el Espíritu Santo estuvo con los amigos de Jesús y también estará contigo para guiarte en todo momento.